Mujeres condenadas a muerte


En una prisión, hay tres mujeres encerradas, dos morenas y una rubia. Han sido condenadas a muerte y han de ser fusiladas una a una.


Evidentemente están muertas de miedo y nada les gustaría más que evitar el pelotón de fusilamiento.


El cura que viene a confesarlas se apiada de ellas y les dice:
.- La gente de aquí tiene mucho miedo de las catástrofes naturales. Creen que son castigos de Dios! Utilizad eso en el momento oportuno.

Al día siguiente la primera morena es llevada ante el pelotón, con las manos atadas a su espalda. El capitán grita:
.- PREPAREN!
.- APUNTEN!


Ella se acuerda de las palabras del cura, y grita con todas sus fuerzas:
.- HURACÁN!


Entonces los soldados huyen alocados en todas direcciones. La segunda morena y la rubia han visto la escena desde la ventana de su celda y quedan impresionadas.


El cura tenía razón! Esto funciona!


Al día siguiente, la segunda morena es conducida al patio. La colocan delante del pelotón, y cuando el capitán grita:
.- PREPAREN!
.- APUNTEN!


Ella se acuerda de la escena del día anterior y grita:
.- CICLÓN!!!!!


Al igual que el día anterior, los soldados corren en todas direcciones para protegerse, mientras ella se escapa.


La rubia ha visto todo desde la ventana y comprueba de nuevo que lo que les dijo el cura funcionaba. Ha entendido perfectamente el truco y se dispone a preparar su táctica.


A la mañana siguiente, es conducida ante el pelotón y cuando el capitán grita:
.- PREPAREN!
.- APUNTEN!


Ella grita con todas sus fuerzas:
.- FUEGO!!!!!!